Matria, instituto sobre cuestiones de género como integrante de la Coalición Internacional de Organizaciones por los Derechos Humanos en las Américas y junto a 200 organizaciones y grupos de sociedad civil, expresamos nuestra alarma ante las declaraciones realizadas por cinco Estados de la región (Argentina, Brasil, Chile, Colombia y Paraguay) cuestionando el funcionamiento del Sistema Interamericano de Derechos Humanos (SIDH). Hacemos un llamado exhortando a estos Estados a abstenerse de realizar acciones destinadas a restringir la eficacia de los órganos del Sistema Interamericano de Derechos Humanos (SIDH).
Las Américas, 2 de mayo, 2019.-
Las organizaciones abajo firmantes, integrantes de la Coalición
Internacional de Organizaciones por los Derechos Humanos en las Américas
y otros grupos de sociedad civil, expresamos nuestra alarma ante las
declaraciones realizadas por cinco Estados de la región cuestionando el
funcionamiento del Sistema Interamericano de Derechos Humanos (SIDH).
Dicho pronunciamiento pareciera reflejar un esfuerzo coordinado para
debilitar la promoción y protección de los derechos humanos en el
continente, en la medida que busca recortar las facultades de la
Comisión y Corte Interamericana de Derechos Humanos.
El pasado 23 de abril un comunicado de prensa emitido
por la Cancillería Chilena anunció que los gobiernos de Argentina,
Brasil, Chile, Colombia y Paraguay, entregaron al Secretario Ejecutivo
de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) una declaración
que cuestiona la “operatividad, funcionalidad y eficacia” del SIDH. Los
Estados firmantes destacan la necesidad de dar una mayor deferencia a
los Estados considerar sus realidades políticas, económicas y sociales,
particularmente, al decretar medidas de reparación. A su vez, cuestionan
las técnicas de interpretación del Sistema Interamericano, el alcance
de las medidas de reparación y los efectos de las sentencias
internacionales para restringirlas a los reclamantes. Adicionalmente,
ponen bajo escrutinio las medidas adoptadas por la CIDH para resolver la
demora en el trámite de casos individuales.
Como
organizaciones de derechos humanos de las Américas, nos resulta
altamente preocupante el tenor de las sugerencias, ya que todas son de
carácter restrictivo y carecen de sustento bajo los estándares y las
normas reconocidas por el derecho internacional, a la vez que suponen
enormes retrocesos para el correcto funcionamiento del SIDH. Recordamos
que, entre 2011 y 2014, un grupo de Estados realizó un cuestionamiento
similar, principalmente dirigido a la CIDH, que terminó en una reforma
reglamentaria. En ese sentido, la declaración ocurre en un contexto de
esfuerzos anteriores que pretendían condicionar las actuaciones y el
impacto de los órganos del SIDH, perjudicando su autonomía e
independencia. Cabe destacar que todos los Estados firmantes tienen
múltiples procesos pendientes ante el SIDH.
Ante
ello, las organizaciones firmantes exhortamos a Argentina, Brasil,
Chile, Colombia y Paraguay de abstenerse de realizar acciones destinadas
a restringir la eficacia de la protección regional en perjuicio de los
derechos fundamentales de sus ciudadanos y las víctimas de graves
violaciones de derechos humanos. Particularmente, frente a contextos
actuales de altas tasas de violencia e impunidad, invitamos a los
Estados a desarrollar un proceso interno de reflexión para garantizar un
mayor cumplimiento con las recomendaciones del SIDH, a modo de
contribuir a su eficacia.
Desde nuestros respectivos países, reafirmamos nuestro compromiso de seguir aportando a apoyar las capacidades y el impacto del sistema regional
de derechos humanos, para que pueda responder a las realidades de
nuestro continente. Nos mantendremos firmes en nuestro trabajo para
garantizar que los órganos del SIDH puedan ejercer su labor de forma
autónoma, independiente, y eficaz, brindando una defensa de los derechos
humanos que parte desde un esfuerzo colectivo e inclusivo. Asimismo,
convocamos al resto de los Estados de la región a sumarse a este
esfuerzo.